ANPE sigue apoyando y asesorando a los docentes que acuden a este servicio víctimas de algún conflicto.

   El Defensor del Profesor es un servicio abierto a todo el profesorado sin distinciones, para favorecer la atención personalizada a todos los docentes. ANPE desde 2005 se ha visto obligado a ofrecer este servicio debido a las circunstancias y a la gran necesidad de ofrecer al profesorado un apoyo gratuito y de atención inmediata para los docentes víctimas de situaciones de conflictividad en sus centros educativos.

   La primera toma de contacto con el docente a través de este servicio es un apoyo psicológico. La gran mayoría se sienten indefensos e incapaces de enfrentarse a la situación que están viviendo tras haber utilizado múltiples vías de solución al problema. Tras darle ese primer apoyo, se les ofrece ayuda y se les asesora de los pasos a seguir incluso si requieren un asesoramiento jurídico.

   De los datos recogidos del pasado curso 2014-15 en la Comunidad Valenciana, el 71% de las llamadas recibidas corresponden a profesorado de Infantil y Primaria; el 21% a Educación Secundaria; y un 8%  corresponde a Ciclos Formativos.

   Comprobamos que, como viene ocurriendo desde años anteriores, se observa un aumento de problemáticas en las primeras etapas educativas en comparación a la educación secundaria, datos que hace solamente unos años sucedía a la inversa. Las causas son varias: aumento de las ratios, disminución de programas de apoyo y refuerzo y los múltiples recortes. Todo ello hace que no disminuya sino que aumente la conflictividad en las aulas.

   A destacar, que esta conflictividad en las aulas es  también reflejo de un problema social de gran calado, y está asociado a aspectos tan diversos como el abandono de las responsabilidades educativas por parte de las familias (el incumplimiento de las normas de convivencia establecidas en los centros), la crisis de valores, el descrédito de la autoridad, la situación del sistema educativo, la violencia ambiental que rodea a los niños y jóvenes y el mal uso de las tecnologías. Todas las carencias de la estructura social exigen a la escuela y al profesorado un esfuerzo enorme, que no va acompañado del reconocimiento de la importancia y la dignidad de la tarea que se les encomienda.

   En cuanto a la tipología de los casos atendidos, en las estadísticas, destacan las falsas acusaciones, amenaza y acoso de alumnos y padres, los problemas para dar clase, los enfrentamientos con padres, la utilización de las nuevas tecnologías como herramienta de acoso y los problemas cada vez más en auge, del profesorado con los equipos directivos del centro. Este último dato en aumento, es provocado por el exceso de atribuciones al cargo. Esto hace que se  cree una responsabilidad que en muchas ocasiones excede de la propia función de la dirección, que debiera ser asumida por la propia Administración.

 ANPE continúa exigiendo a la Administración educativa:

Cumplir y hacer cumplir las normativas establecidas sobre convivencia escolar

Amparo legal a los profesores

Cese de los recortes en los programas educativos de apoyo y compensación

Cese de los recortes en el personal docente

Asistencia psicológica a los profesores y reconocimiento de las enfermedades profesionales de los docentes

 Consideramos preciso que todos los que tienen responsabilidad en el proceso educativo asuman su parte de la misma para resolver de una vez este grave problema y evitar que nuestros índices de conflictividad se equiparen con los que sufren algunos países de nuestro entorno.

   ANPE demanda valoración y respeto al profesorado y la puesta en marcha de un Estatuto Docente que recoja la identidad y las particularidades de esta profesión.